ARGUMENTOS EN CONTRA DE LA COMPLACENCIA EXCESIVA

1. HABITUACIÓN AL REFORZADOR: donde hay confianza, da asco.

poppins
Walt Disney Pictures

Las muestras de cariño cumplen una función social insustituible: informan de tu estado emocional, sirven para agradecer a los demás lo que hacen por ti, establecen lazos afectivos y todas las otras cosas bonitas. Pero si abusas de estos gestos y estás todo el día siendo excesivamente cariñoso y reforzante, la gente se acostumbra y acaban perdiendo el valor que tienen. Acaba siendo lo normal, dejan de ser significativos.

 

2. ESPECIFICACIÓN SITUACIONAL: solo te llaman por interés

superman
Dovemead limited

Si eres excesivamente complaciente, seguro que te molesta un montón cuando te acaban utilizando de forma descarada. No decimos que no sea molesto, por supuesto, pero vamos a planteárnoslo desde otro punto de vista. Si siempre estás ahí cuando te necesitan sin que pidas nada a cambio, si no te quejas cuando te torean o no te tratan como te mereces, si no pides reciprocidad en tus relaciones… ¿qué conclusión es más acertada: que los demás son unos ingratos y unos cabrones, o que les tienes mal acostumbrados?

 

3. LAS REGLAS IMPLÍCITAS: “haz lo que quieras, que yo aguanto”

madmen
Lionsgate Television

Siempre que interactúas con alguien siguiendo el mismo patrón, la relación acaba protocolizándose y siguiendo unas reglas implícitas, como un consenso al que se llega aunque no se decida abiertamente. Si eres demasiado complaciente con alguien la regla que marcará vuestra relación será algo parecido a “yo hago lo que quiera, tú estás ahí pase lo que pase”. Y, aunque muchas películas digan lo contrario, ese mensaje no es bonito. Porque cada vez que quieras salirte de ahí te lo reprocharán basados en la autoridad que da la tradición.

 

4. ROLES ASIMÉTRICOS: “tú dedícate a lo tuyo”

esclavitud
Regency Entertainment

Entre personas muy complacientes, es normal encontrar muestras de inseguridad cuando tienen que dar su opinión u ofrecer consejos. Esto se debe a que priorizan el que su interlocutor esté contento por encima de buscar solución a un problema concreto. Se les pide un consejo y no saben qué decir por si ofenden al otro. Dicho en otras palabras: cultivan un rol emocional por encima de un rol instrumental. Por eso no son las personas a las que se recurre cuando hay que solucionar un problema, de hecho es frecuente que se les considere poco resolutivos. Pero cuando se necesita a alguien que te suba el ánimo y te haga sentir bien, no tienen rival.

 

5. CONDUCTAS INCOMPATIBLES: dificultades para aprender alternativas

ralph
Walt Disney Animation Studios

Por definición, ser excesivamente complaciente y ser asertivo son conductas incompatibles. Y si siempre te centras en ser muy sumiso, al final no tendrás oportunidades para ensayar otros roles que se salgan del habitual. Estarás tú solo marcándote tu propio camino y teniendo dificultades para aprender otros comportamientos que pueden ser necesarios en muchas ocasiones.

 

6. PROGRAMAS DE RAZÓN FIJA: la impunidad que da tener aseguradas las ganancias

juego
Hbo

Cuando la otra persona va a tener siempre, independientemente de lo que pase, una buena respuesta por tu parte, ocurre lo mismo que cuando te dan el premio antes de esforzarte: que piensas algo así como “buah, pues ya para qué voy a currármelo”. Las consecuencias son que empiezas a tratar con una persona desmotivada, dispuesta a no mover un dedo por ti porque, total, haga lo que haga tú vas a seguir ahí a su total disposición.

 

 

7. EFECTO HALO: la pérdida de respeto

breaking
American Movie Classics

Hay comportamientos que están asociados a determinadas opiniones que los demás se forman sobre ti. Responde a la siguiente pregunta: ¿qué imagen se forma por lo general la gente de alguien que es demasiado complaciente? Por lo general la respuesta es que son personas inseguras, con poco carácter y puede que, incluso, manejables. Tú sabes perfectamente que eso no es así, que aunque tu rol sea más sumiso, también te cabreas, te parecen mal muchas cosas y que tienes un código moral bien establecido. Pero si no dejas traslucir estos otros comportamientos, los demás pueden seguir formándose una visión de ti errónea que les conduce a perderte el respeto que te mereces.

por José Manuel Campo

Una respuesta a “ARGUMENTOS EN CONTRA DE LA COMPLACENCIA EXCESIVA”

Los comentarios están cerrados.